El Festival se extenderá lo que resta del mes y durante enero, con el auspicio del ministerio de Cultura y el de Desarrollo Social de la Nación y de la municipalidad de General Pueyrredón.
La programación estará bajo la curaduría del Instituto Nacional de la Música (INAMU), contará con artistas de todo el país y se dictarán talleres pedagógicos sumados a trabajos de creación colectiva in situ, mesas de debate y residencias para muchos de los presentes.
El INAMU considera pertinente la ocasión para dar espacio a la música contemporánea, que goza en nuestro país de gran vitalidad. Desde la vanguardia más innovadora hasta las expresiones populares más experimentales realizarán conciertos.
Pero también intervenciones en locaciones, trabajos de creación grupal trans-disciplinaria y residencias artísticas. Estas actividades tienen como fin acercar y compartir la música tanto entre los mismos músicos, como entre los ciudadanos de Mar del Plata y la cantidad de personas que se encontrarán veraneando.
La división pensada es la siguiente:
SUENASUR NUNA: residencias trans-disciplinarias de experimentación en música contemporánea, en las que se mostrarán trabajos en desarrollo producidos durante las mismas.
SUENASUR INNOVA: conciertos de músicos populares innovadores.
SUENASUR DEBATE: mesas de intercambio de opiniones y saberes sobre temas de interés para los músicos y actores culturales en general, como derechos intelectuales y su relación con la evolución tecnológica, formación de audiencias, música y proyecto de vida, música y ecología, ley federal de las culturas y otros.
SUENASUR SUMA: proyectos pedagógicos para el intercambio cultural, que integran a los músicos locales y permiten que estas acciones se multipliquen en el área de influencia de la Bienal.
SUENAMAR-Proyecto Mar del Plata doce meses: conjunto de conciertos de agrupaciones de músicos de Mar del Plata que mantienen viva la actividad cultural en la ciudad y el municipio durante todo el año.
En su cuarta edición, y al igual que en las anteriores, la Bienal del Fin del Mundo resalta el aporte del arte para imaginar y proponer una forma de vivir en el mundo atravesada por la creatividad y por la posibilidad de integrar a los habitantes de sus confines en la deseada transformación que permita a todos una vida mejor.
En este marco se suma el INAMU, de reciente creación, quien tomó el desafío propuesto por primera vez a la Bienal -enfocada como estuvo hasta ahora básicamente en las artes visuales- de integrar a la música como arte emancipador y transformador de realidades.
El INAMU convocó a curadores especializados que pudieran llevar a cabo la tarea de realizar una muestra de las producciones más relevantes en la actualidad de la música contemporánea argentina.
El fin es facilitar las condiciones para la vinculación entre los mismos músicos, entre artistas de otras disciplinas y entre los músicos y el público. El énfasis de la propuesta se encuentra en generar las condiciones de posibilidad para la creación grupal e interdisciplinaria, la participación de la audiencia y la integración a nivel nacional.
Lo que se busca con estas acciones es democratizar el acceso y el gozo de los bienes culturales, fomentando el ejercicio de los derechos culturales, la construcción de ciudadanía y de identidad.
FUENTE: (http://www.telam.com.ar/)
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